El Ayuntamiento de Eivissa se ha sumado hoy, 17 de mayo, a la conmemoración del Día contra la LGTBIfobia descubriendo un monolito con el que se pretende visibilizar al colectivo LGTBI, luchar contra el olvido y restituir la memoria de las personas que fueron represaliadas por el franquismo por su condición sexual.
Al acto han asistido el alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, y la concejala de Igualdad, Claudia Cotaina que han descubierto el monolito; la directora general de Coordinación, Relaciones con el Parlamento, Derechos y Diversidad, Isabel Castro; representantes de la asociación la Llave del Armario; el presidente de la asociación de la calle de la Virgen, Andreas Ordowski; el presidente del Foro por la Memoria de Eivissa y Formentera, Luis Ruiz Val; y Antoni Roig, ex cura que sufrió persecución durante el franquismo por su orientación sexual y autor del libro 'Todos los parques no son un paraíso. Memorias de un sacerdote'.
El alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, ha dicho que con esta iniciativa 'reiteramos y confirmamos nuestro decidido compromiso con los derechos de la memoria histórica, de justicia y de reparación de este colectivo que ha sufrido tanto históricamente. Tenemos que seguir luchando contra la discriminación de las personas LGTBI, sin dar un paso atrás. Todo lo contrario, dando pasos decididos desde todos los ámbitos de las instituciones y de la sociedad'.
La iniciativa partió del Pleno del Consejo LGTBI de las Islas Baleares, celebrado el día 1 de junio de 2020, donde se acordó por una amplia mayoría apoyar el Manifiesto-propuesta conjunto de las entidades sobre la represión franquista contra lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersexuales en las Islas Baleares. Una de las propuestas del Manifiesto estaba relacionada con la colocación de un monolito en memoria de las personas LGTBI represaliadas por el franquismo por su orientación sexual, que ya existía en algún otro municipio de nuestro país.
El Ayuntamiento de Eivissa reconoce así la represión que sufrió este colectivo durante toda la dictadura y parte de la Transición, con tratamientos contrarios a los derechos humanos como consecuencia de la aplicación de la «Ley de Vagos y Maleantes" y la «Ley de Peligrosidad Social».
La concejala de Igualdad, Claudia Cotaina, ha recordado que 'con esta ley se crearon supuestos centros de rehabilitación, que eran en realidad prisiones donde convivían con asesinos, ladrones y otros delincuentes. Durante aquella época se procesó a unas 5.000 personas por estas dos leyes. Con la colocación de este monolito nos convertimos en el primer municipio de las Islas Baleares en cumplir esta propuesta del Consejo LGTBI, y eso nos llena de satisfacción, porque creemos que es de justicia social y un acto necesario que profundiza en la memoria democrática y la igualdad'.
El monolito ha quedado instalado en la calle de la Virgen, esquina calle Fosc e incluye el siguiente texto: 'Contra el olvido y para restituir la memoria de las personas LGTBI perseguidas y represaliadas durante la dictadura franquista y parte de la transición a la democracia. En homenaje a las personas que sufrieron torturas, encarcelamiento o internamiento psiquiátrico y que nos abrieron el camino a la libertad'.
Esta iniciativa está financiada por el Gobierno de las Islas Baleares, a través del Institut Balear de la Dona y por el Ministerio de Igualdad, Secretaría de Estado de Igualdad y Contra la Violencia de Género.