El Ayuntamiento de Eivissa, a través del Plan Municipal de Drogas ofrece, a 572 alumnos de secundaria de Eivissa, el espectáculo "Darrere la porta", una obra teatral basada en hechos reales, que tiene por objetivo trabajar la toma de decisiones y sus consecuencias.
El espectáculo será mañana 9 de octubre en el teatro de Can Ventosa en dos sesiones, la primera de 10 a 11.30 horas y la segunda de 12 a 13.30 horas y contará con la asistencia de 572 alumnos de 3º y 4º de la ESO los institutos de sa Colomina, Santa María, Isidor Macabich y sa Real.
Para la concejala de Educación del Ayuntamiento de Eivissa, Carmen Boned, 'el objetivo es crear conciencia entre los más jóvenes y conocer las consecuencias de nuestros actos. Este hecho, entre los jóvenes es más complicado porque un o una joven nunca piensa que le pueda pasar nada. Con esta obra teatral, queremos que la juventud reflexione sobre el principio de invulnerabilidad y de la toma de decisiones'.
El espectáculo, recomendado para alumnos y alumnas de 14 a 18 años, podría considerarse una Unidad Didáctica para trabajar la toma de decisiones y sus consecuencias. En un aspecto más amplio podría ayudar en la adquisición de competencias personales y sociales de los jóvenes.
Muchos autores definen la adolescencia como un proceso vulnerable de cambio entre la infancia y la adultez. En esta etapa se definen una serie de necesidades que los adolescentes desarrollan para adquirir su identidad personal, entre ellas están: la necesidad de transgresión, la necesidad de reafirmación y el principio de invulnerabilidad. En la obra por su carácter socioeducativo se identifican claramente y se abordan como centro de interés generando una conciencia muy significativa en el alumnado.
"Darrere la porta" es un espectáculo teatral, escrito e interpretado por dos educadoras, Pilar Cayero y Aurora Cayero, que desarrollan su trabajo en centros de menores de régimen cerrado. Son centros equivalentes a prisiones, donde los y las menores que residen han cometido algún tipo de delito y en los que el trabajo de los educadores y educadoras es vital para intentar ayudar a estos jóvenes a dejar de delinquir y recuperar el control de su vida antes de que alcancen la mayoría de edad y entren en el sistema penitenciario adulto.
Todas las historias que cuenta son reales y surgen de la experiencia de más de diez años de las hermanas Cayero. Algunos de estos relatos son increíblemente duros y complicados pero las creadoras del espectáculo han tenido el acierto de combinar estos episodios con otros cargados de humor. Esta mezcla imposible de drama y comedia pura no sólo sirve para que la audiencia tome aire cuando más lo necesita, sino que también es un fiel reflejo de las paradojas a las que se enfrentan cada día los jóvenes y los y las educadoras en estos centros.