La Policía Local de Eivissa detiene a una persona por violación de domicilio después de que volviera a ocupar un piso del que había sido desahuciada el mismo día por orden judicial.
La Policía Local de Eivissa detuvo en la noche de ayer a una persona acusada de allanamiento de morada y por los daños causados a una vivienda de la avenida de Pere Matutes de la que había sido desahuciada el mismo día por orden judicial. Los hechos se produjeron a las 23:14 de la noche del lunes, cuando la propietaria de una vivienda situada en el cuarto piso de un inmueble informó a la policía que había observado que la cerradura de la puerta del piso había sido forzado, causando daños e inutilizando la alarma. La denunciante optó por llamar a la policía al detectar que había alguien en el interior de la vivienda, según informó a los agentes.
Una patrulla se desplazó al lugar de los hechos para identificar a los ocupantes y registrar a la única persona que se detectó en el interior. En uno de los bolsillos de esta persona, un joven de 32 años, se le encontró el cilindro de la cerradura.
Se da el caso de que esta misma persona había sido desahuciada por una comisión judicial el mismo día de ayer, a las 13 horas. Según explicó, tras actuar la comisión judicial había forzado la cerradura del piso y un amigo le ayudó a desconectar la alarma.
Por estos hechos, el detenido fue trasladado a dependencias del Cuerpo Nacional de Policía donde se practicaron las diligencias correspondientes.